Tragedia en San Antonio: Inundaciones Dejan Múltiples Víctimas y Desaparecidos
Al menos cinco personas murieron y dos se encuentran desaparecidas tras las fuertes lluvias torrenciales que provocaron inundaciones repentinas en San Antonio, Texas. Las intensas precipitaciones, las más fuertes en más de una década, arrastraron varios vehículos, generando una situación de emergencia en la ciudad.
Rescate en Medio del Caos
Los hechos ocurrieron en la madrugada del jueves en el noreste de San Antonio, cerca del vecindario de Perrin Beitel. El Departamento de Bomberos de San Antonio recibió las primeras llamadas de auxilio alrededor de las 5:00 a.m. CDT, en la zona cercana al circuito noreste de la Interestatal 410.
Joe Arrington, oficial de información pública del departamento, informó que quince vehículos fueron arrastrados por las aguas. Los equipos de rescate lograron salvar a diez personas que se encontraban atrapadas en árboles y arbustos, aproximadamente a una milla de distancia de donde habían sido arrastradas. Cuatro de los rescatados sufrieron heridas leves y recibieron atención médica.
Búsqueda Continúa
La búsqueda de los dos desaparecidos sigue en curso. Se presume que fueron arrastrados por la corriente. El Departamento de Bomberos ha respondido a más de 70 rescates acuáticos en la ciudad desde la madrugada del jueves.
Arrington destacó que, si bien la mayoría de los rescates no fueron de extrema gravedad, algunos fueron particularmente peligrosos, obligando a los equipos a adentrarse en aguas rápidas para rescatar a las víctimas.
Río San Antonio Desbordado
El nivel del río San Antonio aumentó drásticamente en la zona afectada por las inundaciones. En apenas dos horas, a partir de las 5:00 a.m. CDT, el nivel del agua subió de aproximadamente 3 pies a más de 25 pies, una velocidad comparable a las inundaciones causadas por sistemas tropicales.
Aunque la lluvia ha disminuido y las inundaciones han empezado a retroceder lentamente desde media mañana, aún se reportan vehículos atascados en zonas con agua alta. Las autoridades permanecen en alerta y continúan monitoreando la situación.