La multinacional Whirlpool sorprendió al anunciar el cierre de su planta de producción de lavarropas en el Parque Industrial de Fátima, en Pilar, provincia de Buenos Aires. Esta decisión implica el despido de 220 trabajadores, generando gran incertidumbre en la región y preocupación por el futuro del empleo industrial en el país.
Según fuentes de la empresa, la medida se debe a la pérdida de competitividad para exportar, sumado a la fuerte competencia de productos importados, todo esto en un contexto de marcada caída del consumo interno. La empresa argumenta que no pudo lograr un modelo de negocio operativo y competitivo en este contexto económico adverso.
Las negociaciones con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) ya están en marcha para acordar un paquete de salida que incluirá la indemnización legal correspondiente, más un plus adicional. La medida afecta tanto al personal de producción como a áreas de ingeniería y calidad.
¿Qué pasará con la planta de Pilar?
Inaugurada en octubre de 2022 tras una inversión millonaria, la planta de Pilar estaba destinada a producir 300.000 unidades anuales, con un fuerte enfoque en la exportación. Sin embargo, este objetivo no se logró, y la empresa ahora evalúa qué hacer con las instalaciones.
¿Continuará Whirlpool en Argentina?
A pesar del cierre de la planta, Whirlpool mantendrá su oficina comercial y de distribución en Argentina, donde continuarán trabajando entre 100 y 120 personas. La empresa asegura que seguirá abasteciendo el mercado local con electrodomésticos, repuestos y servicio técnico, aunque ahora importará los lavarropas desde Brasil o China.
Este cierre se suma a otras señales de alerta en el sector industrial, generando preocupación por el impacto de las políticas económicas actuales en la producción nacional y el empleo. La situación de los trabajadores despedidos y el futuro de la planta de Pilar son ahora el centro de atención.
Algunos analistas vinculan esta decisión con la apertura importadora y la caída en las ventas internas, como consecuencia del modelo económico impulsado por el gobierno actual. La noticia ha generado un debate sobre la necesidad de proteger la industria nacional y el empleo argentino.