El Gran Premio de San Pablo comenzó con drama para los pilotos de Mercedes y Ferrari. Lewis Hamilton, visiblemente frustrado tras quedar eliminado en la Q2, evitó a la prensa y se refugió en el hospitality de Ferrari. Su compañero Charles Leclerc, aunque avanzó a la Q3, también se mostró decepcionado por el rendimiento del monoplaza.
Hamilton al rojo vivo tras la qualy
La eliminación de Hamilton en la Q2 fue una sorpresa. El piloto británico, que largará 11° en la carrera Sprint, no ocultó su frustración. Se le acusa de no reducir la velocidad bajo bandera amarilla doble, lo que podría acarrearle una sanción. La FIA lo citó a declarar junto a un representante de Ferrari por este incidente.
El incidente de Leclerc que perjudicó a Hamilton
El motivo del enojo de Hamilton fue un trompo de Charles Leclerc que provocó la bandera amarilla. Hamilton se encontró con el auto de Leclerc cruzado en la pista, lo que le impidió mejorar su tiempo y avanzar a la Q3.
Decepción en Ferrari: ¿Problemas de velocidad?
Leclerc, por su parte, se mostró decepcionado con el rendimiento de su Ferrari. "No es un problema de puesta a punto, somos muy lentos", declaró el piloto monegasco, recordando las malas sensaciones de la clasificación sprint de Austin. El equipo italiano tendrá que trabajar duro para mejorar el rendimiento del coche de cara a la carrera.
¿Lluvia y caos en la Sprint?
George Russell se mostró optimista ante la posibilidad de lluvia, afirmando que "la sprint puede ser un caos a nuestro favor". La carrera Sprint del GP de Brasil promete ser emocionante, con Hamilton buscando remontar desde la 11ª posición y Leclerc luchando por un buen resultado para Ferrari.