La pasión por el fútbol italiano no conoce fronteras, y los hinchas del Atalanta lo demuestran con creces. Este fin de semana, la escuadra de Bérgamo se enfrentó al Udinese, y la afición respondió masivamente. Nada menos que 881 seguidores nerazzurri coparon las gradas visitantes en Friuli, tiñendo de azul y negro un rincón del estadio.
Udinese vs. Atalanta: Un viaje por la pasión
Esta movilización representa la segunda salida permitida a la hinchada en lo que va de la temporada liguera. Recordemos que, tras incidentes en la autopista con aficionados del Como, las autoridades habían restringido el acceso a los estadios en Turín (en dos ocasiones) y Cremona. El reencuentro fue a lo grande, con casi 900 almas alentando sin cesar.
Próxima parada: Marsella
Pero la aventura no termina aquí. La mirada de los tifosi ya está puesta en el Velodrome, donde el Atalanta disputará su segundo partido como visitante en la Champions League ante el Olympique de Marsella. Para este encuentro, se espera la presencia de 453 hinchas, un número considerable teniendo en cuenta las advertencias sobre el ambiente hostil que les espera en la ciudad francesa.
La logística no es sencilla: dos viajes largos por carretera en pocos días, con la ilusión de regresar a Bérgamo con resultados positivos. A esto se suma el costo, ya que las entradas para Marsella ascendieron a 50 euros, considerablemente más caras que los 15 euros que costará presenciar el partido ante el Eintracht Frankfurt, club hermanado con el Atalanta.
¿Podrá el aliento incondicional de la afición impulsar al Atalanta en estos desafíos? Solo el tiempo lo dirá. Lo que sí está claro es que la pasión por el fútbol en Bérgamo sigue más viva que nunca.