El Gran Premio de Azerbaiyán dejó una sensación agridulce para los aficionados argentinos del automovilismo. Franco Colapinto, joven promesa de Alpine, vio frustrada su carrera tras un incidente con Alexander Albon (Williams) en la curva 5. Un toque que desató la polémica y que marcó un antes y un después en la performance del argentino.
El Incidente: ¿Imprudencia o Mala Suerte?
Colapinto salía de boxes en la vuelta 17 cuando Albon, con neumáticos en temperatura óptima, intentó superarlo. La maniobra, arriesgada en un punto de adelantamiento complicado, terminó con un toque en la parte trasera del Alpine, provocando un trompo y un leve impacto contra el muro. El incidente, observado atentamente por James Vowles, jefe de Williams y figura clave en la llegada de Colapinto a la F1, generó frustración y debate.
Albon se disculpó por el incidente, reconociendo su error. "Tuvimos un poco de lío con Franco, que fue culpa mía", declaró. Sin embargo, el daño ya estaba hecho. Colapinto, que había ganado posiciones en la largada, se vio relegado y con el alerón dañado, lo que complicó su ritmo de carrera.
La Perspectiva de Colapinto
El argentino, a pesar del incidente, se mostró positivo y destacó los aspectos positivos del fin de semana. "Ahí perdí todo. Salí de boxes con flatspots en la goma por la bloqueada y con el alerón roto adelante", explicó Colapinto. "Además de que perdí segundos con el trompo, lo del alerón roto me complicó la vida".
Más allá del incidente, Colapinto reconoció las limitaciones de su monoplaza. "No tenemos el auto, es bastante simple; gastamos mucho la goma, no tenemos ritmo para ir para adelante, hay que tomar muchos riesgos para ir fuerte y no nos salen las cosas por ahora". A pesar de las dificultades, el argentino se mostró optimista y enfocado en seguir mejorando.
Verstappen Imparable en Bakú
Mientras tanto, Max Verstappen (Red Bull) dominó la carrera de principio a fin, consolidando su liderazgo en el campeonato. El neerlandés sumó su cuarta victoria de la temporada, demostrando una vez más su superioridad en la pista. Oscar Piastri (McLaren), por su parte, tuvo un domingo para el olvido, estrellándose en la primera vuelta.
El Gran Premio de Azerbaiyán dejó un sabor amargo para Colapinto, pero también la esperanza de un futuro prometedor. El joven argentino demostró su talento y determinación, a pesar de las adversidades. Ahora, la mira está puesta en el Gran Premio de Singapur, donde buscará revancha y sumar puntos importantes para el campeonato.